SEGURA: Luis


Español. Nacido en 1817. Ingresó a la Compañía de Jesús en 1838. En 1851 fue nombrado Superior de la Comunidad de Guayaquil, pero tuvo que salir casi enseguida desterrado por Urbina con todos los jesuítas. En marzo de 1862 regresa a Guayaquil, donde fue Rector del Colegio Nacional, y lo fue también del de Quito por dos ocasiones.
Posiblemente en su segunda estancia en Guayaquil conoció a Narcisa, convirtiéndose para ella en un padre tanto en lo espiritual como en lo material, pues sabemos que durante una temporada se preocupó inclusive de su alimentación. También le mandó hacer una cruz para que se crucificara en ella, cruz que Narcisa le devolvió cuando ya se sentía cercana a la muerte.
Monseñor Medina nos dice que a Narcisa la dirigía “un padre jesuíta del Colegio de Guayaquil, muy distro en la dirección del espíritu, apellidado Segura”. Es digno de notar que la primera biografía se escribió a Narcisa a raíz de su muerte, fue precisamente und dedicada al Padre Luis Segura, con el objeto de “rendir un público homenaje a vuestra piedad, a vuestra evangélicas virtudes y a nuestro infatigable celo por la gloria del Señor”. Era Rector suplente de Oña (Burgos, España) cuando murió en esa Villa el 6 de enero de 1887, lleno de años y de virtudes, El Padre Segura fue Profesor de Teología con reputación de mucha doctrina.