GALARZA ARIZAGA RAFAEL

POLITICO.- Nació en Gualaceo, provincia del Azuay el 5 de Noviembre de 1903. Hijo legítimo de Cornelio Elías Galarza Arteaga, natural de Zaruma, inteligente y de variadas disposiciones naturales, que de 12 años fue enviado por Domingo Sobrevilla, comerciante al igual que su padre, a seguir estudios en el Instituto La Salle de Quito. Y como expresó sus deseos de ingresar a esa orden lo mandaron los Superiores a la Casa Matriz en Lyon, Francia, donde conoció idiomas y se especializó en matemáticas. Regresó a Quito de 22 años como Hermano Cristiano. Dictó la clase Comercial, culminación del Ciclo Primario en El Cebollar; tiempo después fue llamado a Gualaceo por su protector, pero, al llegar, conoció que había fallecido. Entonces el Jefe Político del Cantón, Juan José López, fundó una escuela para que la regentara Cornelio Elías, quien dejó los hábitos, contrajo matrimonio con Elisa Arízaga López, de Gualaceo, sobrina de su nuevo protector, y tuvieron larga y feliz familia. Después residieron en Cuenca, trabajó de profesor privado de idiomas y matemáticas a domicilio y como topógrafo y agrimensor contratado por finqueros. Falleció joven, de no más de 50 años, dejando a su viuda e hijos en pobreza. También fue un delicado pianista.

Rafael Leonardo fue el penúltimo de siete hermanos. Rebelde desde pequeño, se alzaba contra el amoroso castigo familiar. Su padre le prefería, durante las vacaciones le llevaba consigo a las fincas, en sus correrías profesionales por los caminos azuayos entregándole lecciones importantes de la vida diaria y los infaltables consejos de padre y amigo bondadoso.

En esa época aprendió a cabalgar. Montar a caballo sería una de sus pasiones y a la vez un valioso medio para ganar el pan familiar en varios momentos de su vida, ya como profesor rural, ya como Capitán de arrieros en tiempos aciagos de persecución política y desempleo.

En 1914 finalizó la primaria y poco después murió de pulmonía su hermano mayor, Leoncio. El 15 falleció de cirrosis su padre, sucesos luctuosos que le obligaron a buscar refugio en la imaginación y en la compañía de varios amigos que se reunían en la calle Larga, junto al puente Juana de Oro y entre todos planearon huir a Guayaquil.

Una madrugada se fue sólo, a pié, por el camino a Naranjal, atravesando las montañas de Paucay. En el viejo vapor “El Abel” arribó finalmente a Guayaquil y tras numerosas aventuras consiguió empleo de grumete con su tío segundo Alfonso Correa López, dueño de la balandra “La Nueva Era” que hacía travesías entre Guayaquil y Puerto Bolívar, donde permaneció hasta 1917. que regresó a seguir estudiando en Cuenca.

De aquellos días, nacieron mucho después esas páginas desconocidas que tituló “De Grumete a hombre” que terminó extraviándolas; y como su madre comprendió que debía disciplinarlo, le envió interno al Normal Juan Montalvo de Quito, que gozaba de fama, pero no pudo concluir sus estudios porque con su compañera Rosario Zavala Samaniego, natural de Sigsig, se dedicó un año a la enseñanza privada entre los campesinos, que dejó por la topografía y agrimensura aprendidas de su padre. En 1923 contrajeron matrimonio en Cuenca, tuvieron una larga familia de diez hijos, y a pesar de las vicisitudes propias de la vida política agitadísima que les tocó vivir, siempre fueron unidos y solidarios. Ella fue una mujer modelo, le apoyaba en todo, nunca le creaba problemas y cuando llegaban las adversidades ni siquiera se amilanaba, pues era firme y tranquila.

En 1925 viajaron a Quito y el 30 concluyó becado sus estudios en el Normal. Ese año pasó a enseñar al Normal rural de Patate en la provincia del Tungurahua donde permaneció dos años y salió a consecuencia de los enfrentamientos de la comuna indígena de Leyto, que luchaba por el agua, frente al gamonal colombiano Marco A. Restrepo terrateniente que la había quitado. De allí brotaría un opúsculo lleno de voces de iracundia titulado “Leyto: de cómo un hombre mató a un pueblo”.

En 32 fue designado Director de la Escuela Fiscal “Isidro Ayora” de Paute. El 33 profesor fundador de la escuela municipal “Federico Proaño” de Cuenca. El 35 de la Superior “Luis Cordero”. Fundó el primer periódico “El Tiempo” que tuvo Cuenca y adquirió una casa grande y antigua, de una planta y tres patios interiores en la Vásquez de Noboa y Mariano Cueva, mediante préstamo a la Caja de Pensiones. Ese año también fue designado Inspector Escolar para las provincias de Azuay, Cañar y Loja. El 37 se afilió al partido Socialista Ecuatoriano y empezó a trabajar como dirigente político en el Azuay. En Octubre del 38 ocupó el rectorado del Colegio Normal “Manuel J. Calle.”

El 39 consiguió de su cuñado el Presidente Andrés F. Córdova, un decreto que permitió el ingreso de los Normalistas graduados a las Universidades del país y entró a la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad de Cuenca. (1)

A principios del 41, acicateado por los continuos abusos del régimen constitucional civil del Dr. Arroyo del Río, comenzó a hacerle oposición por la prensa. A consecuencia de ello fue declarado cesante en el rectorado del “Manuel J. Calle”, para sobrevivir comenzó a comprar carbón y leña en el Portete, que transportaba a Cuenca en un camión de Agustín Peralta y para vender al mayoreo estableció una abacería; llevaba sal a los cuarteles de Loja y traía panela y cascarilla, utilizando una recua de muías por el camino de Santa Isabel. El viaje duraba a veces hasta diez días entre ida y vuelta y como no había caminos estables constituía un constante peligro.

Tras la firma del protocolo de Río de Janeiro conspiró abiertamente. El gobierno le puso un pesquisa para que le siguiera a la zaga y por medio de la Caja de Pensiones remató su casa.

Entonces alquiló otra frente a la iglesia de Todos los Santos y celebró tertulias políticas con Eugenio Aguilar, Luis Cobo Moscoso, el boticario Dr. José María Astudillo, coplero y caricaturista,

  • a) El Repe, Joaquín Moscoso Dávila, Rubén Andrade, los hermanos Antonio y Alberto Cardoso.

Durante los meses previos a la revolución del 28 de Mayo de 1944 aglutinó como alma de la conspiración en Cuenca a varios choferes amigos suyos entre esos a Julio Barros, que le fue de gran ayuda. Igualmente eran habitúes a sus tertulias revolucionarias el joven poeta César Dávila Andrade, un portero de colegio llamado Luis Peralta, los zapateros Quinde y Avendaño, el carretonero “Mono Medina” y una vendedora del mercado, típica chola cuencana, a quien decían Carmen la Culibronce. Dichos hombres y mujeres del pueblo, con intelectuales, estudiantes y otras gentes cuyos nombres no ha recogido la historia, fueron en Cuenca, el alma de la gloriosa revolución de Mayo.

Con ellos fundó el semanario “El Grito”, que aparecía los jueves a las diez de la macana en la imprenta velasquista del Dr. Dávila Ponce y salió por espacio de dos años hasta el 27 de Mayo de 1944 día en que los pesquisas apresaron a Galarza Arízaga y le llevaron a la Intendencia en la calle Juan Jaramillo, con Carlos Cueva Tamariz, Luis Monsalve Pozo y otros políticos más, dirigentes de ADE.

Al momento de ser apresado acababa de entregar la edición de “El Grito” a varios choferes amigos, para que fueran a repartir gratuitamente por los Cantones vecinos.

El 28 de Mayo se supo de la revolución en Guayaquil y los presos en la Intendencia fueron amenazados de que serían fusilados si intentaban huir. El 29 se amotinó el pueblo y los sacó en triunfo. Galarza Arízaga se movilizó sin pérdida de tiempo al cuartel “Febres Cordero” del Machángara y tras arengarlos con patriotismo y sentimiento logró que se voltearan; siguió hacia el Salado, donde topó a un batallón que iba de Loja y era arroyista y que al influjo de su palabra también plegó a la revolución. El regreso fue en triunfo, el pueblo salió a las calles, le victoreó con insistencia y en plebiscito que no ha vuelto a repetirse fue electo Presidente del Concejo Cantonal, y siempre con el pueblo a su lado procedió a ocupar el palacio municipal. El 15 de Agosto fue designado Rector del “Benigno Malo” (2)

En 1945 asistió a la Asamblea Nacional Constituyente como Diputado por el Azuay, firmando la nueva Constitución, considerada una de las más avanzadas de su tiempo en el mundo y al término de las sesiones permaneció en Quito como secretario de la Comisión Legislativa   Permanente,   tiempo en el cual terminó sus estudios de Jurisprudencia en la Universidad Central, se graduó de abogado y Doctor. Su familia vivía en Quito.

Para el golpe dictatorial velasquista del 30 de Marzo de 1946 fue acosado, perseguido y tuvo que esconderse dos meses. Después pasó a Cuenca y a través de sus contactos obreros fue designado Abogado de la Federación de Mineros de Portovelo, encauzó la lucha contra las condiciones malsanas de vida y tras ardua brega obtuvo la suscripción del I Contrato Colectivo de Trabajo con la South American Development Co. en Julio del 47. Por entonces vivía con su familia en Cuenca pero pasaba largas temporadas con los mineros en Portovelo.

El 48 fue designado Secretario de la Cámara del Senado y del Congreso Nacional en pleno, por la izquierda, derrotando al candidato conservador- placista Carlos Tobar Zaldumbide y actuó hasta el 52. Mientras tanto fue abogado de las Cajas del Seguro Social de Quito y Guayaquil, dirigía el diario socialista “La Tierra”, intervenía activamente en política y el 50 logró por oposición la cátedra de Derecho Penal en la Universidad Central. El 52, al producirse el entente socialista de Gonzalo Oleas Zambrano con la candidatura presidencial de Velasco Ibarra, prefirió desafiliarse y pasó a Guayaquil.

Había ganado un juicio laboral al propietario de la hacienda “Bola de Oro” en El Oro. contaba con suficiente dinero y abrió su estudio en Pedro Carbo y Aguirre con su amigo el Dr. Enrique Ochoa Merchán.

Era la época de plenitud del populismo, Guevara Moreno lideraba incondicional mente a la Concentración de Fuerzas Populares, partido del pueblo ecuatoriano, y aunque no era amigo de Galarza Arízaga, lo conocía desde tiempo atrás y sabía de su real valía. Por eso lo mandó a llamar y se produjo el siguiente diálogo:

-Quiero ofrecerle un puesto digno de su experiencia, como Jefe de Acción Política. Acepto Doctor, pero con la condición de que me deje las manos libres para propiciar la unificación de las fuerzas anticonservadoras. Guevara Moreno, sin titubear, le estrechó la mano-Haga Ud. lo que mejor le parezca!.

Así fue como entró a CFP y ocupó la Jefatura de Redacción del diario “La Nación” hasta el 56, igualmente dictó Sociología en la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad de Guayaquil y desde el 58 dirigió la escuela de Periodismo. A la vez fundó el periódico “Masas”, órgano de CFP, de corta duración.

Para el 59 trabajó en la provincia del Guayas primero y luego a nivel nacional por el triunfo del binomio Parra-Carrión, que al grito de ‘Parra- Carrón revolución” anunció la reivindicación del proletariado; mas, en las últimas semanas de la campaña, Guevara Moreno dejó de asistir a las concentraciones y dictó órdenes para que el CFP votara por Velasco Ibarra, traicionando el pacto que le unía a las izquierdas. A consecuencia de ello Galarza Arízaga se desafilió y viajó a Loja contratado por esa Universidad a dictar la cátedra de Filosofía, donde maduró el plan de una obra sobre el desarrollo de las Instituciones Políticas Ecuatorianas. Apuros del momento y los sucesos de nuestra política le quitaron tiempo, a pesar de ello logró escribir un ensayo a manera de discurso largo y bajo el título de “Esquema Político del Ecuador”, que apareció en 1963 en 198 páginas y trata sobre la estructura fundamental, el desarrollo cultural, los Partidos y Movimientos Políticos, la vigencia constitucional y el futuro del país. El libro fue bien acogido en los medios políticos y en las Universidades, porque en sus páginas brilla el sociólogo y maestro que iniciado en las abandonadas escuelas del campo, a través de años de esfuerzo había logrado ocupar la cátedra universitaria; pero también destaca el ciudadano patriota y de limpia tradición constitucionalista que escribe para los jóvenes de las mayorías sobre el instante político nacional.

En 1966 decidió viajar a Venezuela en busca de nuevos horizontes pues se 

encontraba decepcionado de la política del país. De inmediato encontró una excelente espacio en la Universidad de Oriente con sede en Cumaná, trabajando como Coordinador de sus Núcleos. Allí afirmaría su espíritu inquieto y se inspiraría para trazar su ideal latinoamericanista en un folleto que tituló “Mil (Movimiento de Integración Latinoamericano). En Venezuela halló a su antiguo amigo César Dávila Andrade, cercano ya de su última asfixia existencial, el querido Fakir lo mandó a buscar más de una vez en esos días saturados de drama.

En Septiembre del 68 retornó al Ecuador a causa del fallecimiento en Quito de su idolatrada esposa, cuya personalidad fue captada por su hijo el escritor y poeta Jaime Galarza Zavala en su poema “Carta Viva a mi madre muerta” enviado desde México, donde él vivía.

Tenía 65 años pero no se consideraba un viejo, prueba de ello fue que con el tiempo se dio ánimos y contrajo segundas y terceras nupcias.

El 72 fundó el Instituto de Investigaciones Jurídico Sociales de la Universidad Central y fue electo su primer Director; igualmente, con el apoyo del Rector Manuel Agustín Aguirre fundó el semanario “Orientación”. que dirigió su hijo Jaime hasta Mayo de 1970 que fue dinamitada la imprenta de la Universidad Central y como persistieran en sacarlo, al golpe dictatorial Velasquista de Junio siguiente, fueron perseguidos sus redactores, dejando de salir tal publicación.

Entonces Galarza Arízaga viajó a Cuenca donde mantuvo una columna en el diario “El Mercurio”, colaboró en varias radios en apoyo a la Unión Nacional de Periodistas y figuró entre los fundadores y sostenedores en el Azuay del nuevo partido denominado “Izquierda Democrática”; sus últimos años fueron esforzados en medio de su pobreza.

Tenía 77 años cuando sufrió un resbalón, cayó por la escalera de la casa de su hija Matilde y se fracturó el cráneo. Llevado de urgencia a la Clínica Santa Ana, no recobró el conocimiento y falleció en Cuenca el 18 de Abril de 1981, tras varios días de hospitalización.

Con tal motivo los maestros del Azuay pidieron reiteradamente a los gobiernos que se honrara su memoria con una calle y un colegio. La Municipalidad de Santa Isabel, reconociéndole el mérito de haber sido el máximo gestor de su cantonización, le ha dado su nombre a la principal avenida de dicha población.

Siempre fue un hombre de lecturas, ameno, amable, y guitarrista a ratos perdidos, pero lo más importante de su recia personalidad fue siempre el ánimo esforzado que sabía poner en todos sus actos.

  1. (1) Con Hugo Ordóñez Espinosa y otros compañeros fundaron la revista “Acción Universitaria” y participaron en el Congreso de estudiantes celebrado en Guayaquil donde se fundó la FEUE.
  2. (2) En la Municipalidad de Cuenca actuó hasta Agosto y en el Benigno Malo hasta Diciembre de 1944.