ESPINAR Y OROZCO JUAN

VICARIO DE QUITO.- Nació en Lima, fueron sus padres Juan Espinar y Francisca de Orozco y profesó en el Convento Dominicano de esa capital el 29 de Junio de 1603. Estudió Artes y Teología leyéndolas después en Chuquisaca y en el Cusco donde fue Regente. Pasó de Prior a Guamanga graduándose de Presentado y de Maestro, estuvo de Vicario en Lima y en 1633 viajó a España de Procurador General del Obispado de Quito, pero el 14 de Enero de 1640 intempestivamente fue presentado para el Obispado de Santa Martha, tenido por el más pobre de América, por su ubicación frente al Caribe, estar rodeado de tribus salvajes y belicosas y sufrir el constante asedio y ataque de los piratas ingleses, holandeses y franceses.

Las Bulas le fueron despachadas en Junio de 1642 y reemplazó al Fraile agustino Antonio de Conderina, ascendido al Obispado de Guamanga en el Perú, quien muy anciano y senil dejó la Sede y viajó al Perú, pero el llegar a Lima, no pudo posesionarse.

En cambio, Espinar, arribó a Santa Martha en 1643 con nueve pinturas de valor, dotó a la iglesia, fundó varias Capellanías y levantó una Capilla para el Sagrario. El 44 reunió al Cabildo Eclesiástico y entregó nueve cuadros al óleo adquiridos en Roma, colgaduras, un palio con un guión y varias cubiertas de plata, telas, etc. Por la suavidad de su carácter fue generalmente querido, practicó relevantes virtudes pero mantuvo tropiezos con el Juez de Residencia, Vicente de los Reyes Villalobos activo aunque de edad avanzada y tan avariento como su mujer Agustina Sarmiento, que dominaba sus acciones y gobernaba por él. El gobernador todo se lo permitía, incluso que tuviera garito de juego, hasta que la Corte se enteró de esos asuntos y envió a un Residente en enero de 1648, quien puso fin a sus desmanes.

Falleció en el desempeño de sus funciones en 1653 y sus sucesores designados Fray Melchor Albuelanco y Fray Francisco Martín de Velasco y Molina no aceptaron.