CONTRERAS Y VALVERDE VASCO

ESCRITOR.- Nació en la imperial ciudad del Cusco en 1605 siendo sus padres legítimos Francisco de Valverde Maldonado, Caballero de la Orden de Santiago, vecino feudatario de la Encomienda de Guamacota y deudo cercano de fray Vicente Valverde, I Obispo del Cusco, y Melchora de Ulloa y Contreras, también descendiente de conquitadores. El Cronista Antonio de Herrera equivocadamente señaló que Vasco de Contreras era natural de Quito, lo que repitió Pablo Herrera, pero no es verdad.

Estudio las primeras letras en el Colegio Seminario de San Antonio Abad en su ciudad natal, después pasó al Seminario Conciliar de San Martín de Lima y siguió Cánones, finalmente hizo estudios de Jurisprudencia en la Universidad Mayor de San Marcos y alcanzó una esmerada educación. Graduado de Doctor en ambos derechos fue Rector del Colegio Real y Mayor de San Felipe de Lima y regentó las cátedras de Vísperas de Leyes y de Prima de Cánones, actuando como abogado de la Audiencia en dicha capital.

Hacia 1632 viajó a España donde se impresionó con las ciudades y sus monumentos. En 1638 editó en Madrid un “Discurso que propone en justicia el derecho que tienen los Cabildos y Capitulares del Perú a la reformación de la Cédula, que les prohíbe las Visitas”, memorial en favor de los americanos que le hizo famoso y que según el Cronista Gil González Dávila es un “tratado asaz curioso” y para el gran jurista Solórzano, autor de Política Indiana, constituye un “discurso del todo docto y muy ilustrado de todas letras”.

A su regreso viajó por varios lugares de América. Venía con el título de Chantre de la Catedral de Quito y Consultor del Santo Oficio. En 1641 ascendió en el Coro de esa Catedral a Canónigo Maestrescuela y Examinador Sinodal. El 45 fue Comisario Apostólico del Cusco y por orden del Obispo de esa Diócesis, Juan Alonso Ocón, actuó como Provisor y Vicario General del Obispado hasta 1650.

Mientras tanto, en 1646 había pronunciado en la Catedral del Cusco
la Oración Fúnebre en las Solemnes Honras que se celebraron en honor de la reina Isabel de Borbón, primera esposa de Felipe IV; el 48 el Obispo recibió una Real Cédula con carta del Virrey Conde de Salvatierra, ordenándole realizar una Relación de la ciudad del Cusco donde se diera cuenta de todas las cosas notables que hubieren acaecido desde su fundación española, con la descripción de la ciudad y sus monumentos, mas la vida de los Obispos y Arzobispos desde la erección de la iglesia ocurrida el 4 de Septiembre de 1538.

Entonces el Obispo le encargó a Contreras la realización de dicho trabajo “por ser persona docta e inteligente en todas materias y aún mas a propósito de ésta que se trata” y tuvo que revolver archivos, consultar obras y en esos trabajos se le fue todo el año 1649.

Para el 1 de Enero de 1650 terminó, firmó y puso por título “Relación de la ciudad del Cusco, de su fundación, descripción, vida de los Obispos, religiones y todo lo demás perteneciente a lo eclesiástico, desde el descubrimiento de este reino hasta el presente” en 52 páginas y la remitió al Virrey para que la envíe a España.

La Relación de Contreras es un tratado muy completo de la vida del Cusco y su región, pues iniciándose desde mucho antes de la llegada de los españoles, refiere los alrededores de su región, plantas y cómo era la vida de esa ciudad en el siglo XVII, de allí que a fines del XIX el americanista Marco Jiménez de la Espada incorporó los cuatro primeros capítulos a sus “Relaciones Geográficas de Indias” y los dio a conocer. Desde entonces se sabía de esta interesantísima Relación pero no había existido la oportunidad de trabajar en ella hasta que en 1982 la Dra. María del Carmen Martín Rubio se dio el trabajo de localizar el original, proceder a su trascripción y publicación en 197 páginas como un significativo aporte al mejor conocimiento del pasado americano.

(1) El Capitán Martín González de Carranza, era de condición noble, había nacido en la villa de Entrena cerca de Madrid en 1535, vino joven a la conquista. El 15 de Julio de 1565 casó en Lima con Ana Contero Ponce, ese año escribió al Gobernador del Perú respecto a los méritos de Juan de Zárate Chacón. El 68 fue comisionado por su suegro para tratar en Lima con Lope García de Castro y con Álvaro de Figueroa respecto a la conquista de la provincia de las Esmeraldas. Ese año realizó con su suegro una entrada hacia esa provincia y fundaron la ciudad de Castro. A principios del 69 redactó la primera descripción de esa provincia, de regreso a Guayaquil organizó con su cuñado Andrés Con tero Ponce una segunda expedición. En Mayo exploraron el río Daule, cincuenta leguas hacia el norte hasta el punto llamado Colima, hoy Colimes, “encontró un lago donde estaban algunos Incas escondidos cosa de treinta y cinco años”. Salió del lago en Junio y volvió a Guayaquil. En Agosto de 1570 partió nuevamente, estuvo en Campaz en la provincia de las Esmeraldas y hasta parece que llegó a la desembocadura del río Santiago, donde encontró la muerte en una guazabara. Dejó descendencia en su esposa Ana Contero Ponce. Sus padres, que jamás salieron de España, llamaban Juan Sánchez de Carranza y Ayala y Leonor de Mendoza y Saavedra.

Contreras no permanecería mucho más tiempo en el Cusco pues para 1652 figuraba como miembro incorporado al Cabildo Metropolitano de Lima en su calidad de Tesorero de la Catedral y

Consultor del Santo Oficio. Entre el 53 y el 54 fue rector de la Universidad de San Marcos y el 8 de Diciembre de 1658 fue consagrado Obispo de Popayán.

Seis años permaneció en Nueva Granada hasta que en 1.664 recibió el nombramiento de Obispo de Huamanga y con tal fin regresó a Lima y fue consagrado el 17 de Diciembre de 1665 pero a causa de ciertos achaques que le aquejaron y le impidieron continuar el viaje a su diócesis, se quedó en la ciudad virreynal y allí falleció el 2 de Marzo de 1667 a los sesenta y dos años de edad.

Se conserva su retrato de cuerpo entero en la Galería iconográfica de Rectores de la Universidad de San Marcos.