439. Una Boda Principesca

El martes 2 de mayo de 1.948 contrajeron matrimonio civil en la legación ecuatoriana en Roma, a cargo del Dr. Rodrigo Jácome Moscoso, Su Alteza Real María Cristina de Borbón dos Sicilias y Withelbach, Princesa de las Casas Reales de Nápoles dos Sicilia y Baviera (Nacida en Madrid el 4 de mayo de 1.899) con nuestro representante diplomático ante la Santa Sede Manuel Sotomayor Luna y Orejuela. Testigos del Novio fueron Mercedes Flores Chiriboga y el Dr. Carlos Alberto Arteta García y por la novia Su Alteza Real Carmen de Borbón dos Sicilias representada por su hermano el Príncipe Fernando y María Luisa Lambert de Guarderas Sotomayor y Luna.

Al día siguiente miércoles 3 se celebró el matrimonio religioso  en  la Capilla Privada de los Canónigos al interior de la Sacristía de la Basílica Vaticana, oficiando el Cardenal Federico Tedesquini  y el Secretario de Estado Vaticano Juan Bautista Montini, luego Papa Paulo VI, con gran concurrencia de miembros de las Casas Reales europeas de Nápoles dos Sicilias, Austria, Borbón – Parma, Borbón – Este, Baviera, Orleans, Braganza, todos ellos primos de la contrayente, así como numerosos aristócratas italianos como los príncipes Rufo di Calabria, Lencelotti, Borgese, Orsini, Aldobrandini, Gonzaga, Colonna, Picolomini, Borromeo, Sforza, Medicis, etc .

 Tras lo cual, los nuevos esposos pasaron a los aposentos pontificios a fin de despedirse del Papa Pio XII que les recibió en Audiencia privada y concedió su bendición apostólica, con lo cual emprendieron viaje a Baviera, para visitar al Príncipe Fernando Pío de Borbón dos Sicilias, Duque de Caserta y Jefe de la Casa Real de Nápoles dos Sicilias, quien vivía exiliado en Lindau en la región de los Alpes al sur de Baviera, con el nombre de Fernando III.

El viaje se realizó en el automóvil de la embajada manejado por el chofer Lorenzo Conti. Acababa de finalizar la II Guerra Mundial yAlemania se hallaba ocupada por los Aliados, de manera que los recién casados tuvieron que atravesar los territorios de Austria, Liechtenstein y Suiza para cruzar a Baviera.

La novia había trabajado largo tiempo en diversas obras sociales de servicio a los necesitados y durante los años de la II Guerra Mundial formó parte activa de la Cruz Roja Vaticana. El novio era uno de los más respetables miembros del partido conservador ecuatoriano y acababa de ser electo binomio del candidato presidencial  Manuel Elicio Flor Torres, de manera que se requería su presencia para la campaña pues las elecciones estaban convocadas para  Junio de ese año, en que triunfaron por estrecho margen de votos  el candidato liberal Galo Plaza Lasso y para la vicepresidencia su oponente conservador Sotomayor y Luna, que asumió la dirección del Congreso Nacional el 19 de Septiembre de ese año. Mas, al trajín del viaje y su matrimonio, y la dirección del Congreso, se sumó el gravísimo incidente ocurrido en la madrugada del 26 de Julio de 1.949 cuando el Subinspector de la Guardia Civil Julio Gérman intentó con otros oficiales sediciosos tomarse el Palacio y las casas de los mandatarios y aunque fallaron en el intento y fueron apresados, el susto fue igual. Lo cual le provocó el recrudecimiento de una vieja afección a las coronarias y debió bajar a Guayaquil a medicarse, encontrando la muerte a causa de angina de pecho. La célebre boda solamente había durado un poco más de un año.

Su sepelio se realizó en la Gobernación del Guayas con Capilla Ardiente y está enterrado en el Mausoleo Sotomayor del Cementerio General de Guayaquil. Su viuda, establecida en Quito, le sobrevivió largo tiempo.

Como dato curioso cabe mencionar que con motivo de la visita del Rey Juan Carlos de España a nuestro país, mientras caminaba por las calles de Quito, escuchó una voz familiar que le gritaba ¡Juancito ¡  y al voltearse encontró a la Princesa María Cristina, nada menos que su tía abuela, por ser tía carnal de la madre del Rey, a quien abrazó emocionado pues no  veía en muchos años. I es que los inteligentes miembros de la Cancillería ecuatoriana ni cuenta se habían dado que moraba entre nosotros una Princesa de sangre real por los cuatro costados y para colmos, tía abuela del monarca visitante y viuda de un ex Vicepresidente del Ecuador ¡Se quiere más¡     

La ascendencia de esta Princesa, que decidió ser ecuatoriana por adopción, es como sigue:

Padres: Los Príncipes Fernando Pío de Borbón dos Sicilias y Borbón dos Sicilias y María Luisa Teresa de Baviera y Austria – Este.

Abuelos Paternos: Los Príncipes Alfonso de Borbón dos Sicilias y Austria y su prima hermana María Antonieta de Borbón dos Sicilias y Borbón Parma.

Abuelos maternos: El Rey Luís III de Baviera y la Reina María Teresa de Austria – Este y Austria, nacida Archiduquesa de Austria.