SAMPEDRO VILLAFUERTE FRANCISCO

GEOGRAFO.- Nació en Quito el 17 de Febrero de 1915 y fueron sus padres legítimos el Mayor José Joaquín Sampedro, Edecán de Alfaro en 1911, en servicio en Riobamba el 16, uno de los Jefe del Batallón Marañón en Guayaquil para los luctuosos sucesos del 15 de Noviembre del 22, retirado del ejército tras la Revolución Juliana del 25, se dedicó a la agricultura en su quinta de las lomas de Santa Lucía, sembrando maíz, papas, frijoles y falleció del corazón en 1950 (2) y Josefina Villafuerte Estrella, quiteños.
El mayor de tres hermanos, nació en una casa de propiedad de su abuela Agustina Estrella, comerciante adinerada, en la Avda. 24 de Mayo y Benalcázar. En 1916 sus padres le llevaron a Riobamba. El 21 regresaron a Quito y alquilaron al lado de la Basílica, ingresó a la escuela Simón Bolívar cuyo director era el señor Rivadeneira y tuvo de compañeritos a Armando Pesantes García, Jorge Gortaire, etc. El 22 siguió a la escuela anexa al Normal Juan Montalvo y fue alumno del Prof. Héctor Lara
Entre el 27 y el 32 estudió en el Instituto Mejía. Vivían en una casa de su madre, esquina de las Animas, en la Imbabura y Rocafuerte, barrio de San Roque. Entre el 32 y el 36 siguió los cursos de Ingeniería que se dictaban en la Universidad Central y “cuando se creó la Escuela de Artillería e Ingenieros en la Pradera, donde hoy es el Colegio Militar, nos presentamos algunos estudiantes de Guayaquil y Quito y todos fuimos aceptados”.
Por entonces contrajo nupcias con su vecina Beatriz Quijano Valencia, tendrán cinco hijos.
Entre el 36 y el 40 fue alumno de la II Misión Pedagógica Alemana dirigida por el Dr. Hans Sauber, Profesor de Ingeniería. Otro notable pedagogo era el Dr. Grossman, en Física y Matemáticas. A fines del 40 egresó de Subteniente con el título de Ingeniero, fue destinado al Batallón de Ingenieros Córdova en Alausí formado casi en su totalidad por conscriptos de la Provincia del Chimborazo y a fines de año fueron trasladados a Arenillas, en la zona fronteriza de la provincia de El Oro.
El 41 fue comisionado al Batallón Montecristi de guarnición en Casitas, Cordillera del Caucho, Cantón Zarumillas. En Puerto Bolívar había dos pequeños ferrocarriles. Uno iba a Arenillas y el otro al Pasaje, pero desde ambas poblaciones el transporte al interior era a lomo de mula, tal el atraso de nuestro país en materia de vías carrozales.
A principios del mes de Julio comenzó la invasión peruana. Tuvo que recorrer cincuenta kilómetros dirigiendo un pelotón armado. El día 20 arribaron a la población de Chacras, donde estaba su Batallón Córdova ocupando el sitio el Arenal, al pie del río. En la tarde del 22 se produjo el ataque enemigo que fue rechazado. Esa noche la artillería peruana cañoneó terriblemente las posiciones ecuatorianas y en la madrugada del 23 volvieron los invasores a cruzar el río. Su compañero de armas el Teniente Edmundo Chiriboga murió heroicamente y casi a su lado en el sitio La Delicia. El resto de los contingentes ecuatorianos empezaron a ser rodeados por el invasor. Para evitar la maniobra abandonaron sus posiciones a las tres de la tarde del 23. Cuando salía vio ondear la bandera peruana en Chacras, que ya había sido tomada por la caballería peruana.
Esa noche encontró a numerosos compañeros que también iban de retirada en el sitio Bejucal y tras penosa marcha, lo más ordenadamente posible, arribaron a Pasaje y de allí siguieron a Cuenca.
Reorganizado el Batallón Córdova con personal de otros contingentes, en Agosto fue destinado a Riobamba, donde se mantuvo hasta el 43, que pasó al batallón Chimborazo con sede en la población de Esmeraldas, pues su jefe era el Coronel Marcos Bustamante, pariente materno. Mientras tanto, en Enero del 42, el Perú nos había impuesto el irrito Protocolo de Río de Janeiro, para cuya ejecución se conformó a fines de ese año una Comisión Mixta Demarcatoria que procedió a colocar los hitos limítrofes, pero habiendo surgido divergencias de criterio en la zona del divortium aquarum de los ríos Zamora y Santiago y en otros sitios de difícil acceso o de imprecisa ubicación como el Canal del río Zarumilla, Lagartococha, la boca del río Yasuní en el Napo, la unión del Cononaco con el Bobonaza, y el contrafuerte del río Santiago, se designó al Comandante del ejército brasilero, Bras Días de Aguiar, para que solucione esas dificultades, quien actuó con prudencia y meticulosidad hasta Julio del 45, sin poder desbrozar a cabalidad tantos accidentes.
El 44, había sido designado Director de la carretera Baños-Mera-Puyo, fue la primera que tomó a cargo el Ministerio de Defensa. Supervigiló esos trabajos, vivió en el Campamento El Topo y en los meses de invierno del 45 ayudó a fraguar dos puentes de hormigón armado, uno de 100 metros sobre el río Topo y otro de solo 60 sobre el Zuñag, con el Ing. Kordevitch y varios miembros de una compañía europea, contratista de esos trabajos. A mediados de año arribaron al Puyo y dio por terminada su labor. Entonces ascendió a Capitán, aprendió ingles y fue becado a los Estados Unidos, estudió Aerofotogrametría e Ingeniería Portuaria en el Departamento de Comercio del Ministerio de Defensa de ese país en base a los numerosos planos sacados por la Fuerza Aérea norteamericana a 24.000 pies de altura, en diversas zonas – casi todas desconocidas – ubicadas en Sudamérica. Así fue como localizó la existencia de un río que impedía el divortium aquarum entre el Santiago y el Zamora, pues corría paralelo a las estribaciones orientales de la llamada Cordillera del Cóndor, en una distancia de 180 kilómetros aproximadamente, para desembocar en el Marañón. Dicho río fue bautizado con el nombre de Cenepa.
En Enero del 47 recibió su Diploma en el “Aeronautical Chart Branch del Coad and Geodesic Survey” y en la “Civil Aeronautics Admnistraction CAA” La Aerofotogrametría era un método novísimo para levantar planos desde el espacio aéreo y Sampedro fue de los primeros militares latinoamericanos en conocerlo y estudiarlo.
Por esos días visitó Washington el Coronel Edmundo Carvajal Flores, Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea Ecuatoriana, quien fue notificado por Sampedro de esta novedad del Protocolo de Río de Janeiro, así es que entre ambos resolvieron reconocer la zona montañosa de la Cordillera del Cóndor, pues el nuevo río tampoco había sido considerado en el informe de Bras Días de Aguiar.
En Febrero sobrevolaron la zona ocho días a tres mil metros de altura. Salían entre dos y tres veces diarias del aeropuerto de Sucúa en aviones T-6 y C-47 de fabricación norteamericana. Carvajal le hizo prorrogar la beca por dos años más en Washington y a fines de año, en dicha capital, cartografió el primer Mapa moderno del Ecuador, bajo la dirección técnica de los instructores del “Aeronautical Chart Branch”, constando el río Cenepa que antes se desconocía.
En 1948 volvió a Quito, entregó el Mapa y conferenció con el Dr. Julio Prado Vallejo, Jefe de Límites de la Cancillería, pero este lo archivó pues el país no disponía de fuerzas militares como para provocar un incidente de tal naturaleza, que equivalía a reiniciar las hostilidades; sin embargo, el Plano también fue conocido por la Cancillería peruana, que dispuso la inmediata ocupación militar de la cuenca del río Cenepa en toda su extensión.
Meses después ascendió al poder Galo Plaza Lasso, a quien visitó con Carvajal, por dos ocasiones, en el Palacio Presidencial, y tras las explicaciones geográficas del caso y con el Plano de por medio, Plaza decidió proclamar la inexistencia del divortium aquarum y la inejecutabilidad del Protocolo de Río de Janeiro en la zona de la Cordillera del Cóndor, disponiendo que se notifique a las Comisiones Demarcatorias la suspensión de las tareas de colocación de los hitos, cuando ya se habían colocado diez en esa zona selvática y boscosa, cumpliendo el fallo de Bras Días de Aguilar (1)
A raíz de ello publicó el 50 “El Problema Geográfico geomorfológico del río Cenepa, la Cordillera del Cóndor, el río Cenepa, causas de la inejecutabilidad del Protocolo”, explicando los pormenores de su descubrimiento y la trascendencia diplomática del Cenepa y su existencia paralela a la Cordillera. Entre 1952 y el 56 ejerció la Dirección General de la Aviación Civil con sede en Quito. Durante su período se entregaron los aeropuertos nacionales de Macas, Tena, Sucúa, Gualaquiza y Patuca y para la iniciación de los trabajos de los aeropuertos internacionales de Guayaquil y Quito, el Ing. Pedro Carbo Medina, Ministro de Obras Públicas, le comisionó la tramitación de un préstamo internacional en Washington con el Exportant Important Bank, a base de la pignoración de ciertas rentas del estado en el Banco Central. El 55 asistió a la Conferencia de Aviación Civil celebrada en Caracas. El 56 obtuvo sus letras de retiro con el grado de Mayor y pasó a la vida civil.
El 60 asistió en calidad de Asesor a la Conferencia de Cancilleres en Washington y dio a la luz un pequeño folleto titulado “El Ecuador y el Amazonas” y el 63 “El espacio territorial ecuatoriano” texto de mucha utilidad para estudiantes de segundo nivel.
Existe una nueva edición del 92 y otra del 95 incluyendo la guerra del Cenepa desatada por el Perú. Vivía con los suyos en una casa de su abuela Agustina Estrella en la Imbabura entre Alianza y Mideros, de ejercer el comercio y de su pensión de retiro que era escasa.
El 70 editó un “Atlas Histórico-Geográfico del Ecuador” en 200 págs. como simple texto, pero con tal éxito comercial que ha alcanzado tres ediciones como material de estudio a nivel de los principales Colegios de la República.
El 22 de Enero de 1981 se produjo la agresión peruana en Paquisha. Hugo Valencia, piloto de un helicóptero ecuatoriano, fue herido. En los días posteriores fueron abaleados los destacamentos de Mayaicu y Machinatza pues se pretendía recuperar el tramo de la Cordillera del Cóndor que tenían en su poder los ecuatorianos. El arsenal utilizado por los peruanos había sido adquirido a Rusia y a los países del Pacto de Varsovia. El 28 de Enero, aniversario del Protocolo, se intensificaron los bombardeos, pero el Consejo Permanente de la OEA convocó a la XIX Reunión de Consulta de Cancilleres Americanos en Washington para el 2 de Febrero y dispuso el cese de fuegos, que fue aceptado por ambas partes.
La Delegación ecuatoriana estuvo presidida por el Canciller Alfonso Barrera Valverde. Asesor Geográfico fue el Mayor Sanpedro. El Canciller peruano Dr. Javier Arias Stella sostuvo que las tropas ecuatorianas habían violado el territorio del Perú y tras largos debates, la OEA exhortó a ambos países a desconcentrar sus ejércitos y a desmontar los operativos militares, pero el día 20 de Febrero se reanudaron los ataques con más fuerza y fue solamente a través de los países garantes (Argentina, Brasil, Chile y Estados Unidos) que se logró negociar la separación de fuerzas, iniciándose el 26 de Marzo las reuniones entre los Jefes militares Raúl Sorroza Encalada del Ecuador y Jorge Dubois Gervasi del Perú, quienes actuaron en compañía de los representantes de los países garantes, emitiendo sus Notas el 5 de Marzo en Huaquillas y Aguas Verdes respectivamente, tras lo cual se dio por terminado el conflicto, aunque el Ecuador pagó 1000 millones de dólares al Perú en calidad de resarcimiento por los gastos realizados.
El 83 ingresó a la Academia Nacional de Historia con un discurso que primero iba a ser sobre los errores de nuestra Cancillería, pero que a última hora cambió por el de “La Cordillera del Cóndor y el río Cenepa, causas de la inejecutabilidad del Protocolo de 1942, publicado en el Boletín de dicha institución tres años después.
Había asistido a los Congresos Internacionales de Geógrafos Latinoamericanos de la Asociación Internacional la CLAG (Conference of Latin American Geographers) celebrados en Ottawa el 83; en Washington el 86, y en Querétaro el 88, con ponencias sobre el problema territorial ecuatoriano.
Casado en segundas nupcias con Aurora López Pinto, quien había trabajado como Jefa de Almacenes e Inventario en el Ministerio de Gobierno, no huvo descendencia de este enlace. El 9l fue designado Jefe de la Sección de Geografía, del Departamento de Historia y Geografía del Estado Mayor Conjunto con S/. 400.000 mensuales de sueldo. El 92 lanzó su última obra “Auténtica historia de límites – El espacio territorial ecuatoriano de 1830 a 1992” que motivó una dura polémica con la Dra. Norma Plaza de García, quien le acusó de tratar de cerrar la frontera con el Perú, posición antagónica a la que dicha periodista e historiador viene sosteniendo, de mantenerla abierta. (Teoria de la herida abierta).
El 94 salió una nueva edición de su “Geografía histórica territorial” actualizada, con el aporte histórico de su hija Consuelo Sampedro de Poveda, geógrafa de profesión, master en administración de la educación y profesora universitaria de pedagogía, en 321 págs.
En Marzo del 96, a consecuencia de una inyección mal puesta, se le formó un acceso en el gluteo. Operado para mejorarlo, como era diabético, se le complicó la situación, fue llevado al Hospital Militar de Quito, le dejaron de trabajar los riñones y subió la urea.
Alto trigueño, ojos y pelo negro, parsimonioso, de claro ideario liberal radical, falleció en Quito, el lunes 8 de Abril de 1996, de 81 años de edad, de uremia, tras soportar varios días de molestias y dolores que sobrellevó con paciencia y dignidad.