MORENO ESPINOSA MIGUEL

COLECCIONISTA Y MALACOLOGO.-

Nació en la quinta del Panecillo, cercana a Quito y propiedad de su padre, el 8 de Mayo de 1918. Hijo legitimo del Dr. Julio E. Moreno Peñaherrera, abogado, secretario de la I Junta de Gobierno Juliana en 1S25, miembro de la II en 1926, Ministro de Gobierno en 1929 durante la presidencia del Dr. Isidro Ayora. Presidente de la Cámara del Senado en 1939-40, Presidente Interino de la República en Agosto de 1940, y de Victoria Espinosa, quiteños. Fue el cuarto de una familia compuesta de cinco hijos que vivían en una casa propia ubicada en las calles Loja y Quijano.

Estudió la primaria en la escuela municipal Espejo donde su profesor Luis Romo Dávila le inculcó la vocación por el estudio de las Hencias Naturales, su padre, que también era amante de la naturaleza, le hacia observar las abejas y de su rica biblioteca sacaba libros y enseñaba sus láminas, tratando de interesarle por las plantas y animales. Por eso, desde los siete años de edad, recogía los panales en la quinta del Panecillo, familiarizándose con los seres de la creación.

A los doce años pasó al Mejía y “estando en el segundo curso nos reuníamos en diversas casas para mejorar nuestra ilustración a través de un club de lectura, cada uno de nosotros concurría con una tarjeta con el resumen de un libro leído y también formamos el periódico “Vida Estudiantil”(1).

“En Quinto Curso, el Dr. Franklyn Tello, profesor de Botánica, nos mandó hacer un Album y como yo siempre había sido un excelente dibujante, fue premiado el mío, que sirvió para ser exhibido en otros colegios. Además, el Rector Carlos Andrade Marín Malo, profesor de Zoología, nos ilustraba con amenas clases de esa materia, en casa mi padre acostumbraba obsequiarme la revista del Colegio Nacional Vicente Rocafuerte de Guayaquil que traía magníficos artículos del Prof. Francisco Campos Rivadeneira y juntos veíamos las hojas y revisábamos las raras fotografías; todo me empujaba a laespecialización en Ciencias Naturales, que no existía por entonces en Quito; por eso, en 1937, al graduarme de Bachiller en Humanidades Clásicas, ingresé a la Facultad de Ingeniería de la Universidad Central”.

Entre 1938 y el 40 trabajó como calculista en la Compañía Constructora Mena Atlas de Eduardo Mena Caamaño y Federico Arteta con S/. 200 mensuales de sueldo. El 40 pasó de Ayudante de la Dirección de Minas y Petróleo del Ministerio de Obras Públicas, con el mismo sueldo, pero con la ventaja de que podía practicar (2)

En 1941 regresó al Mejía como Profesor de Cosmografía y Geografía y el 46, tras cinco años de docencia ininterrumpida, ocupó el Rectorado de ese prestigioso plantel, habilitando la sección de alumnos internos que pronto se llenó de manabitas.

En 1945 contrajo matrimonio con Olga López Espinosa, con un matrimonio feliz y nueve hijos. Entre el 46 y el 50 fue profesor de Geometría Descriptiva en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Central. En Agosto del 50, tras salir del rectorado del Mejía, a causas de una huella, pasó hasta el 64 de Ingeniero del Plan Regulador de la Municipalidad de Quito. (3) Mientras tanto, el 58, con otros padres de familia del Colegio Espejo, consiguieron la fundación de una escuela laica de niñas que inició sus clases en el local del Colegio 24 de Mayo con el nombre de Colegio Femenino Espejo. Fue su Primer Rector hasta 1975 que se jubiló.

En 1958 construyó un camper que montó sobre el balde de una camioneta Toyota y era tan espacioso que podían caber hasta seis personas. En él realizó numerosas excursiones científicas acompañado de Samuel Valarezo Delgado y Manuel Guerra Leiva a través de casi todo el territorio nacional, en busca de mariposas raras y otros insectos; aunque después se interesó vivamente por recolectar y clasificar conchas y caracoles, pues el Ecuador es el país americano más rico en moluscos de todos los que conforman la llamada cuenca de Panamá, que comprende seis mil kilómetros de costas, que van desde la baja California hasta el Perú. De lastres mil especies de moluscos que allí existen, en los seiscientos kilómetros de costas ecuatorianas habitan más de la mitad debido a que en ellas confluyen, se encuentran y cursan las corrientes de aguas cálidas del Golfo y frías del Polo Sur.

El 67 fundó con Valarezo, Guerra, Gustavo Orces, Rosario de Lafebre y el Dr. Fernando Ortiz la “Sociedad Ecuatoriana Francisco Campos de amigos de la naturaleza”, cuyos estatutos fueron aprobados el 29 de Julio de 1974 y contempla entre sus objetivos principales luchar por evitar la depredación ecológica a través de la exportación de pieles y animales y fundación de un Museo de Ciencias Naturales, que abrió sus puertas y comenzó a funcionar en un local arrendado en 1978, con varias colecciones de aves del Ecuador adquiridas al Zoólogo Prof. Gustavo Orces. Después se compraron otras de conchas, insectos y más invertebrados.

En 1980 la Casa de la Cultura Ecuatoriana prestó un local mejor y el 88 la Municipalidad de Quito cedió en comodato por cincuenta años, un moderno edificio de su propiedad ubicado en el interior del parque de la Carolina, entrando por las Avenidas de los Shyris y Mundo Juvenil.

Actualmente el Museo de Ciencias Naturales de Quito contiene diversas colecciones de Geología, Mineralogía, Paleontología, Botánica y Zoología y se está pensando en reunir otra de Antropología para el futuro. También cuenta con una Biblioteca con libros especializados y una Editorial para las publicaciones que han venido apareciendo, ocho hasta hoy. Otro de sus fines principales es la realización de diferentes actos científicos y culturales, así como eventos de divulgación general.

Desde 1973 dirige la sección de Ciencias Biológicas y Naturales de la CCE, que publica una revista especializada de aparición semestral.

En 1984 desempeñó la Vicepresidencia del Programa MaP de la uNeSCO para el Ecuador, dedicado a la defensa del Hombre y de la biosfera. Entre el 86 y el 88 actuó como encargado de la presidencia de la Sociedad ecuatoriana