Es hijo del escritor ambateño Juan León Mera, autor de “Cumanda”, célebre novela ecuatoriana. En su vida artística Juan León Mera ha alcanzado muchas dignidades y distinciones. Por mucho tiempo fue profesor de dibujo en un colegio secundario. Este pintor ha vivido largo tiempo en el campo. De manera predominante es un paisajista, siendo sus temas preferidos los montes de la Sierra ecuatoriana. Es un pintor apegado a la naturaleza; se detiene mucho en los detalles y nunca ha pretendido explorar las escuelas modernas de pintura. En el diario “El Comercio” de la ciudad de Quito, existe un paisaje de Juan León Mera un prado con árboles y cerros al fondo. En varios salones de la alta sociedad se encuentran paisajes de Juan León Mera, muchos de los cuales no son sino fotografías a colores. Es un pintor que goza de mucha estimación por su bondad y su cultura.
Nació en Ambato en 1832. Autodidacta, a sus doce años se dedico por completo al estudio de la gramática y a una lectura insaciable de poetas. El mismo referiría más tarde que leía a Zorrilla y a Martínez de la Rosa. Conoció larga y seriamente a los clásicos.
Antes de los veinte años había logrado dominar el quichua y, así equipado, comenzaba incursiones por el campo del folklore poético y narrativo. De su contacto asiduo y cordial con el tesoro literario de la raza indígena nacería, años más tarde, en 1892, su obra. Aficionado a la pintura, fue a Quito a recibir clases de Antonio Salas, en 1852, pero un año más tarde estaba ya en Ambato, en su idílica quinta de Atocha, trabajando en su más caro quehacer, el poético, su producción de esta época seria recogida. Un retiro en baños, por 1854, le permite comenzar a trabajar en su epopeya. Un año más tarde es elegido vicepresidente del congreso. Estamos ante una vida muy distinta de las de Llona y Zaldumbide, en la cual la poesía se ha convertido en refugio amado pero al que apenas dejan respiro tantos empeños políticos e intelectuales y hasta literarios no estrictamente poéticos. Y esto continúo hasta su muerte, acaecida en 1894, que sorprendió al grande hombre con muchos trabajos comenzados y otros por comenzar. En 1871 ejerce la senaduría por su provincia en el Congreso Nacional; en 1872 es declarado miembro de la Real Academia Española de la Lengua y sus obras ven la luz una detrás de otra. Trabajos históricos, relatos, biografías, un Catecismo de Geografía.
Socio fundador de la Sociedad Ecuatoriana de Estudios Históricos Americanos, que se instalo en Quito el 24 de julio de 1909.
