Crespo Arévalo Manuel

Fue un sacerdote notable de la Diócesis de Cuenca, en donde ocupo los siguientes cargos: Cura de Deleg en 1885. Rector del Seminario Conciliar de Cuenca, lo cual dice mucho de su valiosa y distinguida personalidad.
En 1901 se le ve como miembro del Cabildo Catedralicio de Guayaquil En 1904 solicito permiso para viajar a Cuenca y se quedo en su Diócesis de origen, pues no regreso a Guayaquil.