VITERI LAFRONTE: Homero


Nació en Ambato, el 24 de enero de 1892. Su padre . Telmo Rafael Viteri y Doña Mercedes Lafronte (de este matrimonio nacieron Anibal, Ilomero, Telmo, Mercedes, Sara y Angélica; algunos de estos nombres, sonoros para la Literatura Ecuatoriana).
Estudió Jurisprudencia en la Universidad Central de Quito. De estudiante, fue elegido para que concurra al Tercer Congreso Internacional de estudiantes Americanos que reunió en Lima en 1912 en representación del indicado centro de educación superior; profesor secundaria y de Derecho Político y Administrativo en la Universidad Central del Ecuador; Ministro de Instrucción Pública Ministro de Relaciones Exteriores, Presidente en varios períodos de la Sociedad Jurídico-Literaria de Quito, Miembro de la Academia de Historia de Madrid, Miembro de la Academia Hispanoamericana de Ciencias y Artes de Cádiz, Miembro de la Academia de la Historia de Venezuela, Miembro de las sociedades Americanistas de París y Bruselas, Miembro de Honor del Ateneo de Ciencias y Artes de México y del Ateneo de El Salvador; Decano de la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales de la Universidad Central, Subdirector de la Academia Nacional de Historia, Formó parte de la redacción de “La prensa” de Quito y “El Telégrafo” de Guayaquil Director del diario “La Tribuna” y del semanario “El Sol”.
Ha dirigido, entre otras, las siguientes publicaciones: Revista de la Sociedad Jurídico-literaria, “Ecuatorial”, “Revista de Educación” “Anales de la Universidad Central”, “Boletín de la Academia Nacional de Historia”. Se le ha otorgado “El busto de El Libertador”, Venezuela; “El Cóndor de los Andes”, Bolivia; “Medalla de la solidaridad”, de Panamá.
Varias monografías y más de cien conferencias se anota en su curriculum vitae, siendo sus principales obras: “Un libro autógrafo de Espejo”, “Los Shiris del Padre Velasco”, “El Centenario de la República del Ecuador”, “El Ecuador y su Salida al Marañón”, “El Asilo”, “El caso Haya de la Torre”. Diplomático de prestigio. Su hermano Anibal es, también, intelectual de trascendencia. Miembro de La Sociedad fundada en 1909 por Gonzalez Suarez y que se Convenio poco más tarde en Academia Nacional de Historia, Miembro que dio lustre a la Sociedad Jurídico – Literaria, “en las páginas de la Revista de la Sociedad dejó la señal de lo que perdió el Ecuador al exponerlo a los are de la Guerra Civil”. En las columnas de “La Prensa” dejó la contextura de su letra.
Telmo, otro hermano suyo, poeta que desapareció en temprana edad, en la poesía perpetuó la señal de sus preocupaciones por la cultura que tanto le desveló; he aquí algunos de sus versos:
¿Eres acaso un espejismo o eres la voz de lo fatal
que nos impele hacia el abismo dantesco y sórdido del mal?
(De “El dolor cuotidiano”)