Juan Viteri, joven de 21 años de edad, cuyos infortunios ya hemos narrado.”El cadre de Viteri había sido cruelmente atropellado, su anciana madre había Sufrido amargos y repetidos desaires; su hermano fué fusilado, y su cadáver insepulto entregado a las aves de rapiña, “El 2 de Julio de 1866, continúa Moncayo, Viteri se vistió, se engalanó lo mejor que pudo, limp 16 su revólver y se lo echó al bolsillo, y calzándose los guantes muy apretados, se dirigió a la estación del ferrocarril, en momentos en que el pito daba la señal de partir al Callao”. ( Viteri no iba al Callao, sino a esperar a Garcia Moreno en la estación del ferrocarril de Lima). “No sabemos la causa de esta precipitación, prosigue Moncayo, que echó el proyecto de salvar a la Patria. Mientras Viteri se paseaba en el salón de descanso, otro ecuatoriano, D. José Félix Luque Plata, conocido como oficioso servidor, se agitaba en otro sentido: como Cónsul del Ecuador, se creía en el deber de acompañar al Ministro y conducirlo a la Capital. Notó la figura escuálida de Viteri que le lanzaba miradas feroces y amenazantes: su sorpresa fue tal, que se detuvo algunos instantes: a contemplar el aire la actitud de ese huésped sospechoso. Enseguida tomó el tren y partió al Callao, donde comunicó sus sospechas a Garcia Moreno, quien mandó comprar armas y las repartió entre los individuos de su comitiva. Después se fue directamente a la Intendencia, habló con el Prefecto, y enseguida pasó al tren, sin ser notado por multitud de proscriptos que le espiaban”. En el momento que iba a descender del carro, en Lima se le acercó Viteri, con guantes y una simple caña en la mano: “¡ Asesino de mi hermano, verdugo de mi familia, vengo a pedirte cuenta de tus crímenes !”, le dijo, García Moreno sacó su revólver y le disparó un tiro. Viteri tuvo tiempo de armarse, y le contestó con otro; pero Alcázar, Herrera, Luque, de la comitiva del Ministro, tomaron la defensa de él. Alcázar, cuñado de García Moreno y adjunto a la legación, disparó varios tiros, por la espalda, a Viteri; Herrera, Ex-ministro de Estado y secretario de la legación entonces, metió los dedos en la boca de Viteri, cuando éste estaba caído, y procuró rasgar los carrillos, intervinieron agentes de Policía, García Moreno fue llevado a casa del presidente del Perú, y el joven Viteri, herido, a la prisión. Obtuvo libertad, meses después; pero murió, a consecuencias de las heridas. García Moreno llegó a Chile, y no tuvo empacho en presentarse de las heridas. García Moreno llegó a Chile, y no tuvo empacho en presentarse con su ministro de Relaciones Exteriores. El mismo que había suscrito, poco tiempo antes, documentos de traición a la causa, y hasta echó baladronadas, indignas de la circunspección de un Diplomático; propuso, probablemente en el concepto de que todos admiraban su hazaña en Jambelí, tomar el abordaje la escuadra española, o mandar una flota a Filipinas, con la condición que él sería el jefe de una y otra empresa.
Copiamos una página, verdaderamente histórica, de D. Pedro Moncayo, casi desconocida en el Ecuador.
