Nació en Que, en 1913.
Escritor y periodista de mérito. Su actividad ha estado estrechamente relacionada con el Diario “El Comercio” de Quito, en donde continúa laborando, ahora como Subdirector responsable.
Ha desempeñado importantes cargos y funciones públicas, entre ellas la de Ministro de Educación, Presidente de la Unión Nacional de Periodistas. Perseguido por Gobiernos totalitarios siempre estuvo al lado de la causa de la democracia. Cultiva el ensayo y la crónica, la crítica literaria y el poema.
En 1937 publicó su primer libro de poesía: “Canto a lo oscuro”. Según Augusto Arias: “El deseo tiene una parábola que Vacas expresa en una decoración incesante y reiterada, y si cede al canto de la evasión, la ausencia le da ligaduras que duelen, cruz dibujada en el pecho, palabras que sobrevivirán a su muerte. ( surte un canto a la tierra y a las cosas olvidadas e inútiles, a las de insignificante destino, como en la víspera de la felicidad esperada que acaso consista en no olvidar nuestra humilde tranquilidad o el barrio primero en donde alentó la primera vida… De sus poemas de la última época hay algunos como “Canción de tu soledad y la mía” que ofrece tales aciertos de imagen y de tónica y continúa esa trayectoria que, al decir de Carrera Andrade, marcó el descubrimiento de un nuevo camino en el panorama poético del Ecuador”. (Panorama de la Literatura Ecuatoriana). Isaac J. Barrera expresa sobre este intelectual: “Al grupo de Lasso hay que añadir el nombre de sus compañeros de formación intelectual. Humberto Vacas G. de esta generación de 1912, publicó su primer libro, “Canto a lo obscuro”, en 1937. Era un grito advertido que se daba a las generaciones con la metáfora de nuevos colores. La sonrisa aflora a sus labios; las imágenes buscan las relaciones más inesperadas en lo cotidiano. Pero el pensamiento se adentra y se eleva. El análisis se hizo torturado y subjetivo. Vacas es poeta de disquisiciones trascendentales, que quisiera sacar de la obscuridad en que se encuentran los problemas de la vida, a la claridad de una exégesis implacable, Cantó a la tierra y a las cosas olvidadas e inútiles, porque quería sacar de su opacidad el brillo que se encuentra en las minas… Vacas es poeta y escritor formal y valioso. Como periodista ha merecido la persecución que es
el mayor elogio que puede hacerse, en este caso…” (“Historia de la Literatura Ecuatoriana”).
Poesía de imagen brillante y sencilla, que agrada y deja sabor para la satisfacción del espíritu. En “Canción de tu sociedad y la mía.” marca nuevos compases yendo a lo universal y cósmico a través del tema singular, pletórico de palpitaciones líricas de buena factura.
No es bastante apretado haber nacido en la dureza
Apretado entre dos gargantas
de un espacio que cabe entre dos brazos?
Muy lejos de un bello refugio de náufragos
atados de pies a su ola o a su marea
y la carne agrietada por la timidez del relámpago.
(De “Vocês íntimas”),
Si bien su participación en el verso alcanza brillantez, su realidad de ensayista le coloca entre los valores más ciertos no sólo del Ecuador; estilo robusto, conocimiento pleno, agradables períodos que convencen y sugieren. Imposible hablar de la idea en el país prescindiendo de Humberto Vacas Gómez.
Continúa, con los mismos afanes iniciales, este ilustre escritor realizando obras de solidez, periodística en especial, rectorado el pensamiento ecuatoriano desde la alta tribuna que dirige.
Otros títulos de su producción: “La educación artística de las masas”, “Panorama de la pintura ecuatoriana”, “Los Estados Unidos que yo vi”.