Asistió como Diputado por el Azuay a la Convención Nacional de 1861 y formó parte del grupo de diputados que no obedecían ciegamente al dictador García Moreno.
Español por el orígen, el carácter, la educación. Vehemente como un mozo. De claro talento, vasta ilustración, dilatada experiencia, vencía con sus razones y fácil elocuencia en las sesiones y encantaba en las Juntas privadas y en las conversaciones amistosas, con la admirable frescura de su memoria, sus citas oportunas y la chispa y gracia de sus observaciones y manera de discurrir. Soldado, había aprendido a combatir con fuego aún en las Asambleas y Congresos.
