En Enero de 1859, García Moreno mandó aprehender a varias personas notables, las que, al día siguiente, fueron expatriadas al Perú. Lo salvaje de esta medida repugna, cuando se sabe de que una de las personas expulsadas fue la señora Baltazara Calderón viuda de Rocafuerte. García Moreno era quien más aparentaba respetar la memoria de este ciudadano; y este respeto lo demostró ultrajando a su viuda, por castigar opiniones, que probablemente manifestó la señora en privado. Expatrió también a los militares Coroneles. Gregorio Rodríguez.