Probablemente fue originario de Cuenca sus nombres están registrados en la genealogía parroquial de Zamborondón. En efecto, fue cura propio desde el 24 de junio de 1828 hasta el 30 de noviembre de 1831. Tuvo como Cura Teniente el Rdo. Bernabé Martínez.
Le cupo el honor de presidir aquella histórica población del Guayas, al tiempo en que la capital de Quito y demás pueblos del Sur de Colombia efectuó el solemne pronunciamiento por el cual se constituyo el Ecuador en Estado soberano, libre e independiente.
El acta histórica, que el pueblo samborondeño la suscribió por medio de sus autoridades, tiene también la firma de este distinguido sacerdote y la del Rdo. José María Ortega, que probablemente fue hermano o pariente cercano del Padre Juan de ortega el mismo que tal vez sería Coadjutor o estaría de paso. El Acta en mención dice así y está firmada el 30 de noviembre de 1830:
“En la parroquia de Samborondón a treinta de noviembre de mil ochocientos treinta, y 20º de la Independencia. Reunidos los padres de familia y el venerable cura que abajo suscriben, a invitación del digno Teniente de esta parroquia, en una época en que el Sur de Colombia envuelto en un sistema tenebroso llegaba ya a ser la propiedad del mal y el pábulo de la desgracia por creer sus hijos ser felices arrojando su seguridad, su fortuna y su existencia misma, bajo el sistema ecuatoriano, determinaron a ejemplo de los señores militares de este Departamento, y de los habitantes de Cundinamarca, Cartagena, Istmo, Zulia, Cauca y otros mas, depositar su felicidad en manos del amoroso Padre de las tres Republicas quien compadecido al ver la triste ceguedad de los hijos del Sur, y oyendo la lastimera voz de este pueblo, creemos positivamente nos volverá a la unión, paz y tranquilidad, haciendo revivir las sabias leyes de la Constitución colombiana, emanadas de un profundo saber y de su genio inmaculado; y a fin de que nuestros actos se tengan por legítimos, nombramos por Juez parroquial de este pueblo al mismo Teniente, quien por su patriotismo y adhesión ciega a S.E. acreedor a mayor destino; y habiéndolo aceptado el mando, inter el Gobierno del cantón con arreglo a lo dispuesto por el soberano congreso de la Republica (de la Gran Colombia) nombre otro juez parroquial, resolvemos lo siguiente:
1º convencidos íntimamente de la necesidad que tenemos de ser gobernados por el sabio Legislador Simón Bolívar, para que nosotros y nuestros descendientes liguemos al colmo de la felicidad, damos por nulo todo lo que se haya sancionado por el congreso (de Riobamba) del Estado ecuatoriano, (que se inicia con J.J Flores, el 13 de mayo de 1830).
2ª Que el juramento prestado a las Leyes del Estado ecuatoriano, fue creyendo que S. E. el Libertador no mandaría ya en Colombia, por la ingratitud de algunos hijos desnaturalizados; y sabiendo en el día que Bolívar está a la cabeza de nuestra Republica no podemos por menos que reclamarlo y reconocerlo por Presidente de la Republica de Colombia, jurando nuevamente la Constitución sancionada en Bogotá el presente año (5 de mayo de 1830) protestándole igualmente ser fieles a su sistema político y militar, por hallarnos persuadidos que la mejor gloria que podemos poseer en el mundo, es el morir sosteniendo a toda costa sus sabias leyes.
3º Que esta acta la trasmita el Juez nombrado al señor Intendente del Departamento (que era entonces la autoridad máxima), suplicándole que eleve nuestros sentimientos a S.E. el Libertador, y con esto concluimos la presente acta en Samborondon a treinta días del mes de noviembre de 1830-20.
El Teniente, Pedro Pacheco y Astudillo. El cura Juan de Ortega y Pacheco. El Presbítero José María Ortega. Fermín Vargas, Juan Gómez Cornejo, José Cornejo. Pedro Romero, José Coelo. Pedro Alvarado, José Valero”, Siguen las firmas.
Nació en Cuenca en 1895. Se educo en la escuela de los Hermanos Cristianos de su ciudad natal.
Llamado por Dios al Sacerdocio, ingreso en el colegio de Aspirantes de la Vble. Orden de Santo Domingo, en Quito. Dotado de claro intelecto y de reconocida virtud paso al Corista do en donde terminados sus estudios teológicos recibió la Ordenación Sacerdotal el año 1918.
Veinte años ejerció el ministerio sagrado como miembro de la ínclita Orden Dominicana, pues, luego de hacer los trámites de exclaustración, se presento ante el Excmo. Sr. Obispo de Guayaquil, José Félix Heredia para solicitarle la gracia de ser admitido en su Diócesis. El mencionado Obispo agradecido y pleno de alegría lo recibió con la mayor benevolencia, ya que, sabia de los valores positivos del P. Ortega.
Inmediatamente le destino a la Vicaria Foránea de Balzar, en donde estuvo desde el 3 de abril hasta el primero de abril de 1941.
Luego, fue enviado a la Vicaria Foránea de Catarama en donde sirvió desde el 9 de mayo de 1941 hasta el mes de junio de 1944.
Después fue nombra de Vicario Foráneo de Machala, desde el 9 de junio de 1944 hasta el 31 de 1947.