En 1868, Mera citó en su “Ojeada” unos pocos versos del fragmento del poema sobre San Ignacio, el intercaló en su estudio algunas de las mencionadas decimas; siete las mejores, de entre las que alaban a la ciudad natal del poeta, y dos, más inocentes, de entre las que publico, en su antologías de “Antigüedades Literarias”, las mismas siete decimas a Guayaquil. Se obtuvo de publicar las referentes a Quito.
¿Fue esta misma colección la que Molestina recordaba haber visto en poder de su padre? “Hace más de veinte años, dice en 1868, se proponía mi padre enviar a los Editores de la América Poética, una colección de copiosos manuscritos que contenían las mejores composiciones del P. Aguirre, pero un amigo a quien se le prestó lo ha perdido.
Se refiere Gonzalo Zaldumbide al “Poema Heroico a San Ignacio de Loyola, en Silva, del Padre Aguirre Carbo.
