Sacerdote docto, de morigeradas costumbres, y uno de los mejores jurisconsultos que entonces había en lima, de donde era nativo. El nombramiento de Presidente le llego en 1668; mas, cuando se disponía para venir a esta ciudad lo detuvo en Lima el conde de Lemos, para que le sirviera de consejero en el gobierno del virreinato. Se educo en Lima, fue alumno del Colegio de San Martin y regento, por más de once años, la cátedra de código y la de prima de leyes en el Universidad de San Marcos; Desempeño el Cargo de protector de indígenas, y fue muy respetado por su saber y por su probidad. Ocupo destinos elevados en la colonia y murió estando presentado para Obispo de Trujillo en 1675.