Crespo Toral Remigo

Remigio Crespo Toral nació en Cuenca, el 4 de agosto de 1860, hijo de Don Manuel José y de doñas Mercedes. Nació en momento crucial de la historia patria muy pocos días después de los vecinos de la recoleta villa celebraban con campanas y con iluminación de calles y casas, alborozados, la victoria de Babahoyo. El niño creció en la heredada familiar de Quinjeo, valle cercano a Cuenca. A los pocos años fue llevado a escuela que regentaba D. Juan B. Cordero, pero muy pronto volvió a las tierras de su infancia, y allí fue su madre su maestra.
A los siete u ocho años sintió la primera moción estética ante un atardecer dice u biógrafo del poeta; otro sitúa esos comienzos de  creación a los catorce años de todos modos, muy pronto, casi en la infancia, Crespo Toral comenzó a cantar. Y canto el campo. Nunca faltarían mas tarde en su poseías notas bucólicas que recordasen sus primeros versos campesinos, de esos años mozos “en que laboraba todo el día en el campo con la azada en la mano”
A los doce años de edad, en 1872, ingreso al colegio  Seminario regentado por los padres de la compañía de Jesús. Brillante alumno y entusiasta aprendiz de escritor, formo parte del “Liceo de la Juventud” fundado por el ilustre Matovelle, del que años más tarde asumiría la presidencia. En el colegio y en el liceo tuvo relaciones de discípulo o de cámara de letras con Honorato Vásquez con quien le uniría entrañable amistad con Matovelle y con Matovelle y con Moreno y con González Suarez, quien lo llevaba en su compañía en los paseos de la tarde, que se estilaban en Colegios de jesuitas del tiempo, y aprovechaba esas caminatas para guiarlo por el mundo de los libros.
En 1877 comienza sus estudios universitarios, y los cierra en 1886 con la brillante defensa de una tesis sobre la institución del jurado, a la que rechazaba por perniciosa.
En 1879, bajo la dirección de Matovelle, y en compañía de Alberto Muñoz Vernaza, Luis Antonio Chacón y Manuel Felipe Serrano funda la “Academia de derecho Público En el mismo año Lee su discurso de incorporación al liceo de la Juventud, sobre “la poesía patriótica”.
1880 es el año en que comienza su larga y facunda vida de periodista con un artículo en “El Fénix” de Quito. A partir de 1881 escribirá sin interrupción y buen numero artículos, notas, recensiones, en “El Correo del Azuay”. Y en 1884 al asumir la presidencia del Liceo de la juventud, fundara la revista literaria “El Progreso”, empresa en la que estuvo junto a su hermano Cornelio Honorario Vásquez y Miguel Moreno. Para Márquez Tapia, en nota escrita en 1960, aquella “fue la revista de mayor importancia que hasta hoy Cuenca ha tenido”.
1870 a 1880, fue en los círculos que rodearon la juventud de Crespo Toral, una década de poesía mariana, al estilo del libro representativo “Sábados de Mayo” (1877(. Manuel Nicolás Arizaga llevo su canto por nuevos caminos, patrióticos y heroicos. Y si duda esos caminos tentaron a Remigio Crespo Toral. Ello es que en 1883 imprime en Cuenca su primer folleto de poesías para cantar a “los voluntarios de la patria. A los vencedores el ejercito restaurador y especialmente a mi amigo Alberto en Quito para celebrar el centenario de Bolívar, con “Últimos pensamientos de Bolívar”.
Sin embargo. La primera gran cifra en la jornada poética de Crespo Toral es “Mi poema”, que ve la luz en 1885 a sus veinticinco años de edad. “Mi poema” que ve la luz en 1885, a sus veinticinco años de edad “Mi poema” testimonio un mundo y anuncia una importante novedad. El mundo aquel es colonial en sus estructuras familiares, devoto en su religiosidad apagado a la tierra; ultimo retoñar y retoñar bucólico, del viejo tronco romántico que broto sus últimas flores en el rico azuayo. Un mundo que emparenta directamente con el de los “Sábados de Mayo”. La novedad es cierto aire que agita esa fronda romántica. Más tierra y mas humanidad y menos devoción. Parece que el poeta se había entusiasmado Longfellow, a quien había dedicado un artículo en los Anales de la Universidad de Quito en 1883, al año de la muerte del poeta, con el significativo título de “Un nuevo ideal poético” Longfellow le había sugerido tópicos tan decisivos como la nacionalización de la literatura y le había mostrado posibilidades de poesía narrativa. Las semillas de la “Leyenda de Hernán” estaban echadas”
1883 año en que conoce a Longfellow, año de su sonato triunfo en Quito, es también año en que su ciudad le confía por primera vez la diputación a la Convención nacional.
A la convención llevaría las primeras experiencias de persecución política y a convención lo elevarían en compañía de otros altivos ciudadanos que se habían o puesto a Veintimilla, al grado de coronel. 

En 1894 fue designado Director de estudios del Azuay; en 1898 y 1889 se le confió la segunda vez la diputación por el Azuay, y volvió a ser diputado en 1904-1905-1928-1929 y en 1930-1931, en esta última ocasión como representante de las provincias orientales. En 1925 asumió el Rectorado de la Universidad de Cuenca; la gobernaría aun otros dos periódicos. En 1922 fue concejal de su ciudad, y presidio ese Concejo Municipal en 1926.
Entre todas las acciones del hombre público hay una debe ser destacada de modo especial porque ella Crespo Toral se hizo benemérito de la nación Ecuatoriana: sus estudios y escritos relativos a nuestra cuestión limítrofe En 1904 fue contratado en calidad de Abogado consultor de la legación del Ecuador en el Perú y España presidia la Legación de sus buen amigo, Honorato Vásquez; para defensa del pleito territorial del Ecuador  y el Perú, encomendado al arbitraje del Rey de España. A los seis meses presento el Proyecto de Alegato.
En 1902 había comenzado Crespo Toral a publicar su “Pleito Secular” en “La Unión Literaria”. Año a año con tal cual interrupción seguiría con esa serie de la que dijera Calle que “solo dentro de la incuria gubernativa se comprende que no hayan sido reunidos en volumen y repartidos como pan bendito en aldeas y ciudades, para consuelo de los ecuatorianos”. Eso escribía Calle por 1917; en 1928 apareció el “Pleito Secular” y el “Divorcio de Colombia” en la Revista de la Universidad de Cuenca y en folleto aparte.
En 1928, al tiempo de la coronación del poeta, en discurso dedicado a estudiar su obra poética, Honorato Vásquez reconocería la novedad de Horizontes temáticos de modos liricos que importan las “Leyendas”. De “nuevo derrotero que la perspicacia que le es propia, abre Crespo Toral”, hablo Vásquez.
En 1917 es año memorable para la poesía de Crespo Toral, y hasta para la Lirica nacional: ven la luz dos libros capitales de nuestra poesía de finales del novecientos y comienzos de este siglo, las dos obras mayores del Grupo Cuencano: “Leyenda de Arte y otros poemas”, en Quito, y “leyenda de Hernán” en Cuenca.
Ese mismo año, el poeta pone en las manos de Manuel J. Calle “Genios”, que el gran periodista morlaco publicaría al año siguiente en Guayaquil. 
Para que se completasen las cinco grandes fechas de Crespo Toral poeta solo Faltaba “Plegarias”, efusiones de su alma religiosa recogidas en el otoño de la vida cinco años antes de su muerte, en 1934.
Hay que añadir que su lirismo no corrió solo por cauces de Versos. Escribió hermosas prosas liricas y cuentos humanos y tiernos. Cuentos como “Fidelidad” (1913) “Los pumas” (1921) “Quien paga” (1936) “El tonto Pedro” (1938) y “Dos almas gemelas” (1938), reproducidos en revistas y libros escolares y antologías, había hecho las delicias de niños y jóvenes.

En la casa, sede del Núcleo del Azuay de la Casa de la Cultura ecuatoriana, nació, en Cuenca, el 4 de Agosto de 1860, murió el 8 de julio de 1939. Antes de los 14 años ya escribió ensayos de prosa y verso y en 1874 colaboro en “La Abeja” y fundo “El Alba” semanario manuscrito. A los 19 años publico su primera elegía “En la muerte de Grau”. A los 21 años fundó con H. Vásquez “El Correo del Azuay” y el “Liceo del Azuay”, fue la primera institución académica de las muchas que tuvieron su nombre dentro y fuera del país. Sus triunfos poéticos se iniciaron en el Certamen del centenario del libertador en que obtuvo la Palma de Oro con “Últimos Pensamientos de Bolívar (1883). En 1885 fundó “El Progreso” periódico literario, político y edito “Mi poema” que tuvo-cuatro ediciones diferentes. Su labor literaria no le Quito tiempo para intervenir eficazmente en la política nacional, regentar la Universidad de su ciudad, impulsar su progreso vial y social y tomar parte en nuestras comisiones de Limites. Su coronación como poeta está justificada por sus poesías publicadas y las inéditas, que juntamente con la prosa ha comenzado a editar la Academia de la Lengua Ecuatoriana. Su Bibliografía consta en el 1 volumen, de 179 páginas, que registra 73 libros y folletos 1331 artículos en prosas y 293 colaboraciones en versos en más de 128 revistas y periódicos. Uso los seudónimos de Ático, Leca, Rancio y Stein. Sus libros principales en versos, son: “los Voluntarios de la Patria” II 10pp. 1883, “Mi poema”, 4ta. Ed. XXIII-90 pp. 1908. “últimos pensamientos de Bolívar” y “América y España en lo porvenir” VII-61 pp. 1889, “Leyenda de Hernán” 175 pp. 1917, “Leyendas de Arte y otros poemas” XII 404 pp. 1917, “Genios” CVII-129 pp. 1917. “Facies” Christi”, 14 pp. 1929 y “plegarias” XXIV 162 pp. 1934. En prosa “Algo acerca de enseñanza universitaria”, 22 pp. 1906. “Cien años de emancipación”, 49 pp. 1909. “Olmedo”, 32 pp. 1921, “Miguel Moreno”, 48 pp. 1925, “geografía de la Antigua Provincia del Azuay” 57 pp. 1926, “Pleito Secular”, 64 pp. 1928 “La sombra de Sucre”, 52 pp. 1932 “Selección de ensayos” XI-519 pp. 1936 “García Moreno”. 144 pp. “Bolívar”, El héroe y el Genio de América” 197 pp. 1944 y “La armonía social” XVI-205 pp. 1947.

Redactor del periódico “La Patria Ecuatoriana” en 1896. Cuenca 
Redactor del periódico “El Pensamiento Nacional” 1891, Cuenca 

Redactor del periódico “El Correo del Azuay” en 1881
Colaborador del periódico “El Independiente2 en 1883
Semblanzas ilustres por Remigio Crespo Toral. Cuenca-Ecuador  1960 (editada con motivo del primer centenario de su nacimiento, Cuenca, agosto 4 de 1960. Remigio Crespo Toral: obras completas. Editorial Cajica, S.A. 19 Sur 2051, Puebla México. Los seis primeros volúmenes (todos de poesía) comprende de un total de más de tres mil páginas para unos quince títulos, con un largo estudio crítico del P. Francisco Miranda Rivadeneira, S.I. entre otros, “Edición preparada por la biblioteca ecuatoriana de la lengua, y publicada con el patrocinio de los familiares del eximio Vate y Polígrafo Sr. Dr. Dn. Remigio Crespo Toral, por la Editorial Cajica de México”, como reza un pliego adjunto a esta edición, en donde consta un juicio crítico del P. Aurelio Espinoza Polit. Dos de sus poesías, tomadas del tomo III y un esquema de sus obras completas. 
En mayo de 1927, decía el Dr. Crespo en el Preliminar del Poema Heroico: “El circulo literario a que yo pertenecía, firme en la convicción de que mi índole se enderezaba hacia ciertas divino a la manera de Quintana, me señalo para el discurso de incorporación en el liceo el tema la poesía patriótica, acerca del que hube de disertar en sesión solemne de la sociedad”.
Y a la vuelta de la pagina, agregaba: “Doy ahora la final edición de ese poema.
Redactor del Periódico “El Progreso” 1884, Cuenca.