Bernal Antonio

Antonio Bernal por octubre de 1792 presento su documentación de cirujano al Cabildo de Guayaquil tiene una fugaz aparición en la historia. Su titulo de cirujano le fue otorgado por el Protomedicato de Lima y comenzó a ejercer su profesión en el mes de diciembre del mismo año. 

Doctor Antonio Ruiz Bernal a Comienzos en 1824, se trataba de presbítero, al cual se lo designo Director de la vacuna. Según lo demostró el Maestro Mayor de Barberos, Juan de Dios Molina, la vacuna contra la Viruela ya había prendido en brazos de niños; bajo Ruiz Bernal como Director, continuo Molina de Vacunador con el sueldo mensual de 30 pesos. 

Ruiz Bernal renuncio el cargo en julio del mismo año, cuando se pretendió responsabilizarlo de la perdida de la vacuna lo que parecía inminente. La Junta de Sanidad fue entonces reestructurada con el Regidor Decano Cornejo y los ciudadanos Martin de Icaza y Francisco Bernal. La junta se vio obligada a recurrir nuevamente a Ruiz Bernal; pero este renuncio por segunda vez en enero del 25 esta vez con su ayudante Molina. 

El “doctor Bernal” que se descubrió en 1823 para examinar al nuevo boticario del hospital, Joaquín Mascote y para integrar la comisión encargada de seleccionar la nueva ubicación del Hospital.