Arboleda Pacifico


14 de Agosto de 1883 en Guayaquil en la Jefatura Suprema de Pedro Carbo Director Dr. José y Matías Avilés G.
No pocas veces, tuvo el redactor de la Bandera Nacional que entrar en polémica con otros periódicos, especialmente con la República, del Dr. Vicente Paz, y la unión, de don Pacifico Arboleda, ambos periódicos adictos al Gobierno provisional de Quito. El Viernes 23 de Agosto de 1883, apareció el bisemanario La Unión, cuyos redactores eran el Sr. Don Sixto Juan Bernal, de quien ya hemos hablado otras veces en el curso de nuestra relación, y don Pacifico E. Arboleda quien, por primera vez, aparecía en el periodismo nacional, y del cual sólo se conocían una correspondencias que, con el pseudónimo de Tulio, era dirigidas desde Lima a Los Andes. De esta ciudad. En tales circunstancias, el 8 de Enero de 1886, apareció El Anotador, periódico bisemanal, cuyos redactores eran los señores Sixto Juan Bernal y Pacifico E. Arboleda, y dirigido a la Defensa del Gobierno conservador. Desde el primer número, a pesar de que él, mismo hablaba  de circunspección y calma, atacó rudamente a la prensa de esta ciudad, a la que no comulgaba en las mismas ideas, a la que no sostenía los mismos principios que el bisemanario. Pero tal era temprano del Sr. Arboleda, buen escritor por los demás; y no dejaremos de decir que el Sr. Bernal, viejo periodista, veterano en esas luchas, guardaba más calma y acostumbraba moderar los ímpetus de su compañero. Durante el año 1886, cuando arreció la campaña armada, publicó El Anotador, continuamente, ediciones extraordinarias. El viernes 16 de Octubre de 1889, apareció el primer número de El Censor, diario de la tarde, de regular formato, de sólo dos planas a cuatro columnas y editado en la imprenta del mismo nombre. Aparecía, como editor responsable, Teodoro Alvarado B…, tipógrafo y sus redactores fueron el Dr. Vicente Paz y Dn. Pacifico Arboleda. El Centinela, diario fundado y redactado por Dn. Pacifico E. Arboleda, y destinado a la defensa del Gobierno.
Era de formato grande, de cuatro planas, a cinco columnas; su primer número circuló el 22 de Octubre de 1894, editado en la oficina tipográfica.
En 1894  en la sección Editorial y en las columnas del diario El Imparcial. Hallamos en sus páginas, interesantes colaboraciones de don Pacifico E. Arboleda.