Apolo Hno.


La partida del Hno. Adolfo Hector, llamado por los cuencanos “Lujodel Instituto” y posteriormente la del Hno. Agulis (Mayo de 1868), dejan vacíos en la sufrida comunidad Cuencana. Frente a la dirección del establecimiento queda el Hno. Apolo, religioso de relevante mérito, el cual obtiene en el mes de septiembre, el traslado de la escuela a la casa de la Sra. Bárbara Malo, situada en la Plaza Mayor.