En 1830 en el convento hubiese surgido un lego indio legítimo de Quito, “Fray Antonio Latuna”, genuino fenómeno en música sacra y de yapa, fundador de una escuela de música en la que de destacaron el Agustino Fr. , José Viteri y el lego seráfico Mariano Baca…Para colmo del arte, Altuna ganó en el duelo contra el pionero P. Mideros, el cargo de Maestre de Capilla de la Catedral de Quito que contó, desde entonces, con su organista metropolitano.