Capitán – Conquistador
Gobernador de Quito – 1538
Teniente de Capitán General de Quito en 1539
El extremeño Lorenzo de Aldana vino al Perú con la expedición de Don Pedro de Alvarado, que llegó al Reino de Quito en 1534. Fue recibido por el Cabildo de Quito como Juez de Comisión en 1538. Al año siguiente Aldana presentó al Cabildo de dicha ciudad una provisión por la que Francisco Pizarro le nombraba teniente General del Gobernador de Quito y Quillacinga, en reemplazo del Teniente Gonzalo Días de Pineda.
En tiempo del Presidente La Gasca, Aldana le ayudó mucho en el arreglo de tributos, dice Manuel de Mendiburu, y en el acuerdo de algunas providencias protectoras para los Indios, a fin de que no le reputasen como esclavos, no les cargasen como a bestias, ni se sirviesen de ellos los Españoles discrecionalmente como lo hacían del modo más inhumano. Coopero también ya en la develación de Pizarro, ya en la Pacificación de las Provincias del Perú, alborotadas por dos bandos célebres el de los Almagros y el de los Pizarros.
A este personaje muy influyente en los sucesos iniciales de la colonización hispánica, en varios de los territorios suramericanos (Perú, Ecuador, Colombia y Chile) le recuerdan los historiadores como “Hombre moderado, prudente y de suma experiencia”