Coral Murillo Luciano

Que estaban lejos del país como el General Páez, o desterrados como Luciano el Coral, entraron en la refriega.

Nació en Tulcán, Provincia del Carchi, el 15 de Abril de 1867. Siendo muy joven aun, a , los 15 años de edad, formo parte de las tropas revolucionarias del norte al mando del coronel Manuel Folleco contra la dictadura del general Ignacio de Veintimilla, que había dado un golpe de estado el 2 de abril de 1882. Terminada esta campaña, en la que obtuvo el grado de teniente del ejército ecuatoriano, vino a Guayaquil en 1883 con las tropas restauradoras. Coral se dedico primero a enseñar en esta ciudad y después a colaborar en los diarios y revistas de la época con carios seudónimos, pero el más conocido de todos fue el de “Heroldo”, Escribió como cronista a los 18 años de edad en “La Nación” (1885), en “El globo” (1887), en “El Tiempo” de Guayaquil, el 23 de Enero de 1899, el primer diario liberal, con don José de Labierre, el que estuvo situado en la Plaza de San Francisco. Fue también uno de los fundadores de “El grito del pueblo”, el 22 de enero de 1895, con José Lapierre y Federico V. Reinel. Diario de Combate y revolucionario que contribuyo al desarrollo del diarismo Guayaquileño y logro gran renombre bajo la dirección del último de los periodistas citados. Pocos después, el encargado del Poder ejecutivo, Dr. Vicente Lucio Salazar. Inicio la persecución contra el nuevo vocero de la opinión pública que con sus artículos fogosos había encendido la chispa de la revolución liberal para echar por los suelos el dominio conservador y desterró entonces a Panamá a los periodistas Coral y de Lapierre. Cuando Posteriormente se traslado a vivir a Quito fundo el diario “El Tiempo” (1901-12), y fue esta circunstancia la que le acarreo su trágica muerte como veremos después.

Sus ajetreos políticos en la oposición lo condujeron al destierro en 1895, como ya dijimos. Luego de la transformación del 5 de junio, volvió al país lo nombrado el General Eloy Alfaro su secretario Privado. En Gatazo, el 14 de Agosto de 1896, cerca de Riobamba, la Lucha contra las tropas del General José María Sarasti fue reñida. Alfaro en persona recorrió el campo de Batalla con su ayudante el teniente Coronel Luciano Coral, dando las ordenes necesarias para reforzar las partes débiles y mantener la disciplina indispensable para obtener la ansiada Victoria liberal. Como Militar, el coronel Luciano Coral, ascenso que le concedió el congreso de 1909, estuvo en la frontera con el Perú, en 1910, durante el conflicto armado con el vecino país cuando nuestra patria se vio amenazada de ser invadida. Luciano coral, desde el Diario el Tiempo, de Quito, del cual era su director propietario, había abierto a mediados de 1911, una furibunda campaña contra el recientemente electo Presidente Emilio Estrada casi le insinuaba que renuncie por la enfermedad que adolecía. El 26 de octubre fueron allanados los talleres del tiempo, siendo destruidos por los simpatizantes del nuevo Gobierno de Estrada, con la consiguiente pérdida para su propietario, Don Luciano Coral. Después de la muerte del Presidente Estrada de la dolencia que le afectaba, el Periodista coral, desde las columnas de el tiempo, siguió fustigando el régimen y a la auto candidatura presidencial del General Leónidas Plazas Gutiérrez, ex Ministro de hacienda del Fallecido.
Coral fue Gobernador del Carchi (1895), diputado Secretario de la convención Nacional de 1896-97, Diputado varias veces por Carchi, Imbabura y Guayas, Secretario Privado de la Presidencia de la Republica, Ministro del tribunal de Cuentas en Guayaquil y catedrático del colegio Nacional Vicente Rocafuerte. Este periodista mártir publico límites entre el Ecuador y Perú, conflicto Internacional

Ecuador y Perú, el Ecuador y el Vaticano o la revolución Religiosa en el Ecuador (342 págs.) publicado en la Imprenta de El Tiempo, en Aguirre y Pedro Carbo, la Religión y el Estado, documentos, Batalla de Torqui, Artículos de Heroldo (recopilación de 1895, a 1896 con este seudónimo), Indicaciones en la Cámaras, Presentimiento fatal, la Suprema Ley, Por la verdad y la Justicia, debate sobre el sufragio de la mujer, debate del Divorcio consensual, etc. El General Plaza, haciendo cado omiso de la capitulación, apreso en Guayaquil a los generales Eloy, Flavio y Medardo Alfaro, a Manuel Serrano, Ulpiano Páez y Pedro J. Montero al comandante Saona y al Coronel Luciano coral, Director propietario de “El Tiempo”, cuyo periódico había dejado de publicarse el 22, en Quito. Coral fue llevado el 26 de enero por Ferrocarril a la capital, en unión de los demás presos bajo la custodia del Batallón Marañón, al medio día del 28, y fueron llevados el automóvil al Panóptico. En la celda, uno de los asesinos del periodista le puso su grotesca mano en la boca y le desgarro los labios. Luego le echaron una soga al cuello y a lo que salió la lengua se la agarraron con un trapo y con la punta de una bayoneta lo sometieron al horroroso martirio de cortársela de raíz de un solo tajo, cuando aún estaba vivo. Después miles de manos criminales lo arrastraron al igual que a los otros presos, ´por las calles de Quito. Algunos testigos aseguraron como evidente el hecho de que Coral y otros fueron un gran trecho cuando aun sentía correr sus venas la sangre que hacían verter con saña sus victimarios hasta producirle la muerte. Se dijo quien le arranco la lengua con crueldad y la exhibió en la punta de un bastón, fue tal Abraham o Manuel Antonio Salgado, verdugo Imbabureño, a paga de los reaccionarios (otros dicen que se llamo Alejandro Salvador). Su muerte, según la opinión pública, se debió a venganza personales del General Plaza Gutiérrez y del Dr. Freile Zaldumbide y sus Ministros, a quienes siempre combatió con su pluma su diario el Tiempo.

Falleció 28 de enero de 1912.